Historia, Bases Doctrinarias y Objetivos
del MCM Cóndor
“… era necesario
para descubrir la calidad de Moisés, que el pueblo de Israel sufriera la
cautividad de Egipto…” Nicola
Macchiavelo “El Príncipe”
Cumpliendo el mandato de Dios, Moisés tardó 40 años en
atravesar un desierto que tiene el tamaño de una provincia como Córdoba o
Santiago del Estero. No tardó tanto tiempo porque sí. Era necesario que cuando
llegaran a la Tierra Prometida tuvieran que luchar por ella, para ocuparla y
defenderla, que murieran en el camino los viejos con mentalidad de esclavos que
se rendirían y dejarían esclavizar antes de comenzar el primer combate, que
murieran los adoradores del Becerro de Oro que, como corruptos, venderían el
esfuerzo de su pueblo, que nacieran en el desierto los que serían educados como
creyentes y guerreros, los que llevaran a cabo el mandato de Dios para que en
su seno pudiese nacer NS Jesucristo.
Moisés es uno de los grandes conductores de la
historia y nunca se dejó llevar por una impaciencia que frustrara la
Trascendencia del Designio Divino y su mandato: “Te envío para que liberes a mi pueblo” Ex 3:10. La misión de Liberación de los pueblos del
Señor aún es una tarea pendiente y ésta es una historia, no de frustración sino
de cómo la impaciencia y/o una desviación doctrinaria liberal pueden frustrar
la Liberación.
Cóndor como idea primigenia nace en el Penal
Militar de Magdalena en 1988, cuando el Sistema hace coincidir a un grupo de
militares arrestados a raíz de los sucesos de Semana Santa 1987, Monte Caseros
y toma de Aeroparque de Enero 1988. Ya estaban allí los Comandantes del Proceso
desde 1976 a 1982. La prisión militar hace desaparecer ciertos impedimentos al
diálogo que existen entre Comandantes y oficiales subalternos cuando están en
Servicio. Las discusiones entre ambos grupos sobre los hechos del Proceso y
Malvinas, llevaron a los “recién llegados” a la conclusión que los planteos exclusivamente
militares fueron superados por la Historia, que los objetivos no deben
limitarse a una reivindicación puramente “gremial” sino que deben estar
integrados a un cambio estructural en lo social, político y macro-económico; y
que debe fundarse un Movimiento Nacional Cívico Militar para el logro de sus
objetivos.
El “Modin” nació en la
Prisión de Magdalena y el Vcom. Horacio
Ricciardelli es uno de sus fundadores. Con los indultos, los fundadores se
integran en la vida civil y política.
La pugna
nacional-liberal nace con la Patria y no hay organización militar o civil que
esté libre de ella. Por otro lado, la hegemonía cultural liberal como la
concibe Gramsci, ha sido tan intensa y en todos los campos de la actividad
diaria, que muchas veces tenemos tan incorporado al “enano liberal” en nuestras
conductas, que nos es muy difícil superar estas conductas. Esto también pasó
dentro del Modin entre muchos que no querían, ni podían superar su lastre
liberal, y otros que hacían un esfuerzo nacional-revolucionario.
El núcleo fundador de
Cóndor nace en el seno del “Modin” y con civiles de distintas extracciones que
se agrupan en torno al Vcom. Ricciardelli y otros militares. Pronto se
encontraron con muchos que, desde el Proceso, “no habían aprendido nada, no habían olvidado nada”.
El “Modin” creció
rápido y hacia atrás, desde un intento nacional a un retroceso al liberalismo.
En poco tiempo se convirtió en una tercera fuerza, un aluvión civil de “agua, lodo y piedras”. Es muy difícil,
excepto si se trata de un Conductor como el Tgrl. Perón aprender a conducir una
fuerza de tal magnitud y, en el período de pocos meses, adoctrinar los cuadros
revolucionarios, dotarlo de la experiencia necesaria, evitar las acechanzas del
Sistema con sus tentaciones, sus infiltrados, los agentes concientes e
inconscientes del enemigo, sus operaciones de inteligencia, las medidas defensivas
de contra-inteligencia, la desinformación, las trampas ideológicas con origen
en Londres (Adams Smith o Karl Marx), los defectos y vicios que el Sistema
inculca en nuestras conductas, las contradicciones entre los ideales de unos y
las mezquindades de otros, las ignorancias jactanciosas, las especulaciones
individualistas, las cortes de los milagros, corruptelas que muchos alaban como
“viveza criolla”, confundir los medios – las bancas de representantes -
con los fines de la Liberación.
Nadie se hace
conductor en un día, ni de un camión de 30 toneladas, ni de un avión de
transporte, ni de un movimiento de liberación. Es necesario ir de lo chico a lo
grande, de lo sencillo a lo complejo. Darle la conducción de una gran unidad
estratégica de combate a quien no está capacitado sino para conducir pequeñas
unidades tácticas, conduce a la derrota. Y la conducción política es mucho más
difícil que la militar. Cuando se está en servicio sólo hay que mantener por
inercia una disciplina que ya estaba en la institución. Cuando se es conductor
político se debe estimular una auto-disciplina de los militantes que surja de
su propia convicción y generosidad patriótica. No hay reglamento, ni militar ni
político, que obligue a un hombre como Belgrano y tantos otros, a que abandonen
todo por el servicio a la Patria. Y nos llega al alma la enseñanza de NS
Jesucristo, ante el egoísmo del joven rico que pese a su discurso piadoso se
negó a abandonar sus bienes: “… es más
fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el Reino
de los Cielos” Mt 19:24
Vimos en estas luchas internas
del Modin porqué Moisés persiguió a los adoradores del Becerro de Oro. No es
una historia de dimes y diretes entre militantes sino de conductas a superar,
del lastre de prácticas que arrastramos y nos impiden liberarnos, porque
debemos hacer una Lucha Santa contra el Enemigo Externo y una Lucha Santísima
contra el Enemigo Interno, porque nosotros mismos, no podemos vencer al Enemigo
Externo si no nos vencemos a nosotros mismos; que el Enemigo nos vence desde
adentro y no podemos hacer armas buenas con malos materiales.
Estas disidencias
entre los impacientes por mejorar su situación personal a la brevedad posible,
y los partidarios de construir algo trascendente, se manifestó – y con
violencia – en Agosto de 1993. Así se desprendió “Cóndor” del “Modin” y comenzó
la “travesía del desierto”. Los sucesos de las constituyentes de 1994 nos
confirmaron que estábamos en lo cierto.
En Semana Santa de
1995 tuvimos la suerte que nos visitara el Cdte. Hugo Chávez Frías y luego el
cro. Vcom. (R) H. Ricciardelli lo visitó por primera vez en Caracas en Junio de
1996. Fue una gran experiencia e intercambio de Información Estratégica
respecto a América Latina y el Tercer Mundo. Los cros. Chávez y Ricciardelli
firmaron un pacto bolivariano-sanmartiniano y, desde entonces somos hermanos en
la Lucha de Liberación.
Las líneas
estratégicas comunes, con variantes tácticas que dependen de cada país, pueden
delinearse en:
1.
Una dirigencia revolucionaria nueva. Los acontecimientos del 11.Abril en
Venezuela nos muestran contra que clase de enemigo debemos enfrentarnos.
Su discurso sobre la Democracia es una hipocresía. Cuando ven en peligro sus
inversiones e intereses no vacilan en el Golpe de Estado y la Dictadura.
Pero lo más importante
de todo, su arma más eficaz, es la Inteligencia que explota la Corrupción local.
Ya desde las Invasiones Inglesas, William White – jefe de la Inteligencia
británica en Buenos Aires, escribía a Lord Strangford que pagaba a Saturnino
Rodríguez Peña y Aniceto Padilla £ 360 al año – salario de dos capitanes de
fragata de la Royal Navy - para mantener dos células de inteligencia, pero
estas permitieron la información necesaria para las Invasiones Inglesas, el
robo del tesoro de Sobremonte y la fuga del General Beresford y sus oficiales.
La corrupción nos
acompaña, nos divide, nos enfrenta y nos vence desde antes de la Revolución de
Mayo y ha sido la madre de todas nuestras derrotas. Belgrano, Moreno, Güemes,
Artigas, San Martín, Dorrego, Rosas, y muchos otros cayeron derrotados por la
corrupción. Leandro N. Alem, Hipólito Irigoyen, Juan D. Perón, no dejaron
descendientes y los movimientos que ellos fundaron cayeron en manos de
corruptos integrados al Sistema.
“Nuestro
objetivo (para vencerlos) no es luchar contra los argentinos sino que ellos
luchen entre si” Lord Palmerston al Parlamento en Londres - 1849
Cuando hablamos de
dirigencia revolucionaria nueva, nos
referimos a que no hay salida dentro del
Sistema. Es necesario cambiar el Sistema y por eso es revolucionaria, y debe
ser nueva porque no podemos triunfar con las viejas prácticas que nos hacen
caer en la corrupción, la división, el enfrentamiento y la derrota.
La dirigencia
revolucionaria nueva no puede practicar los usos de la vieja política corrupta
compartiendo la Ética materialista del Imperio. El Imperio, como Roma lo hizo
en Palestina, como Inglaterra en Argentina, sólo puede vencer cuando impone su
ética. El imperio solo puede ser vencido, como lo hicieron Pedro y Pablo en
Roma, cuando el oprimido impone su Ética al Imperio.
Nunca están demás
todas las medidas anti-corrupción que puedan tomarse, son medidas de vigilancia
nacional. Los militantes deben estar muy atentos a las conductas de los
dirigentes y muy especialmente a las corruptelas.
“Los hombres son buenos, pero si se los vigila son mejores” Tgrl. Juan
D Perón
2. Estrategia Sin Tiempo. No significa quedarse sin hacer nada. Por
el contrario, hay que hacer mucho pero superando los plazos egoístas y
mezquinos que los pequeños burgueses de Argentina quieren para su salvación
individual en lo material.
Un régimen
nacional-revolucionario como mero sistema de reparto ya no nos resulta posible
dentro del Nuevo Orden Mundial y tampoco nos interesa. El Imperio del Nuevo
Orden Mundial quiere imponerse en tres dimensiones: a) En el Espacio y
abarcando todo el planeta; b) En el Tiempo y durando siglos; c) En el interior
de nuestras mentes gobernando nuestros espíritus.
Pero a medida que
avanza su Tiranía Totalitaria, va creando lo que Perón llamaba los
“anti-cuerpos”: son más y más los excluidos, los despojados, los condenados de
la Tierra que confrontan la propaganda y las promesas con la realidad de la
existencia. Son cada día más los engañados que se ven despojados y lloran su
“paraíso burgués perdido”.
También son muchos los
que se nos acercan histéricos y nos dicen “no
nos dan los tiempos”. Pero no hablan de Tiempos en sentido bíblico sino de
plazos procesales en el sentido de la Ley de Quiebras. Tienen un plazo de 50
días para llamar a Convocatoria de Acreedores y quieren que hagamos una
revolución antes de ese plazo y que los salvemos de la quiebra. Aún si
hiciéramos una revolución, aún si salvaran su negocio, luego se irían a sus
casas y sin la más mínima Solidaridad por sus semejantes, y atribuyendo su
salvación material sólo a sus propios méritos.
Nuestros Tiempos son
otros. Hemos aprendido de los mezquinos y miopes en que confiaron Yrigoyen y
Perón, los que a los pocos años de la muerte de sus líderes traicionaron sus
ideales y se vendieron al Sistema por corrupción. Nuestros Tiempos son los de
Moisés. Nuestros Tiempos son los de una “travesía del desierto” en que vayan
muriendo los viejos pequeños burgueses pancistas que derrotan cualquier cambio
con su mezquindad egoísta y vayamos educando a los nuevos argentinos en una Ética
y Moral Solidaria, que sean los
guerreros que derrumben las murallas del Jericó materialista que frustra a la
Patria desde mucho antes de 1810.
“Hay un tiempo para todo y un tiempo para cada cosa bajo el sol; un
tiempo para nacer y un tiempo para morir; un tiempo para plantar y un tiempo
para arrancar lo plantado; un tiempo para matar y un tiempo para curar; un
tiempo para demoler y un tiempo para edificar” Ecl. 3:1
La impaciencia es
contra-revolucionaria. No se puede construir sobre la arena. El apresuramiento
provoca la derrota estratégica y, tales derrotas tardan décadas en ser
superadas. La imprudencia no es una virtud revolucionaria ni beneficia al Bien
Común.
3. Etica y Nación. No incluimos acá un tratado de ética, o moral
según la raíz latina. Pero, hasta el más materialista de los antropólogos
ingleses, es decir del enemigo, reconoce que, una comunidad o una nación no
pueden subsistir sin una ética y moral, y la única forma de conquistar y
construir un imperio es destruir por dentro las bases ética-morales de los
oprimidos.
Nuestro objetivo no es
político sino social: solucionar los problemas sociales de los oprimidos al
terminar con la Opresión. La política es solo un medio para mejorar lo social.
Una política que no mejore lo social no sirve.
Toda política y/o
economía debe estar subordinada a un concepto filosófico y este a su vez
subordinado a un concepto religioso que genera la conducta ética/moral. La
política y/o economía fallan si falta lo ético/moral que nace de lo religioso.
Aún un Sistema
material tan poderoso como el soviético cayó cuando faltó lo ético/moral y todo
el sacrificio de sus pueblos quedó en manos de corruptos. Pudieron construir un
Muro ‘material’ en Berlín, pero fracasaron al faltar un Muro ‘espiritual ético/moral’
que alejara las prácticas corruptas del imperialismo. Fracasaron en el terreno
de la corrupción donde siempre ganan los que construyeron la “Civilización de
la Corrupción”. Lo demás, opresión, hambre, guerra, muerte; es consecuencia de
esta “civilización”.
En esta lucha contra
el imperialismo, la principal trinchera a defender es nuestro Espíritu. E nada
sirve que avancemos sobre trincheras materiales si abandonamos la trinchera del
Espíritu. No le interesa al Imperio que un ejército enemigo avance en el
terreno material. Si retroceden en el Espíritu el Imperio ya venció. Es la
historia de todo el imperio anglo-americano. Vencieron en la medida en que
corrompieron. Aún en los choques entre británicos y americanos, cuando éstos se
jactaban de ser “la segunda nación en la
Historia fundada con las enseñanzas de la Biblia”, los británicos ganaron
cuando se impusieron la visión mercantil y farisea y, lo que fue la primera
ruptura con el Imperio, se transformó en un Imperio aún más poderoso.
Detectados los
corruptos, la Inteligencia británica los convierte en aliados, socios menores
de su opresión imperial.
Pecados contra Dios y la Patria. El pecado es una falta contra la
razón, la verdad, la recta conciencia, es faltar al amor para con Dios y para
con el prójimo, es el apego perverso a ciertos bienes. Hiere la naturaleza del
hombre y lo rebaja al nivel de la bestia, y/o atenta contra la solidaridad
humana. Se define como “una palabra, un
acto o un deseo contrarios a la ley eterna”.
El Pecado Social
(Pecado del Mundo para S. Juan), es un mal humano fuera de la conciencia de los
individuos pero que se imponen a ellas, son las Estructuras de Pecado o
Violencia Institucional, las generadoras de Pecado Social. El Pecado Social no
es la suma de pecados individuales sino Estructuras económico-sociales
sustentadas por una visión ética-cultural corrupta.
Las estructuras no
pecan pero son eficaces colaboradoras del Mal, usadas no solo para cometer injusticias sino para justificar las mismas injusticias. Las
malas estructuras ético-morales son lo que la tendencia al Mal es al individuo:
arrastran al mal. Pensemos en estas estructuras que se convierten en jurídicas
y justifican que el individuo se vea condenado a la miseria, despojado de su
trabajo, de su techo, de su derecho a la educación, a la salud, sancionado con
el hambre de sus hijos y la falta de futuro para su familia, la subsistencia en
la marginalidad, el alcoholismo, la droga, el delito, la prostitución, la
enfermedad.
Pensemos en las
estructuras que permiten pagar legalmente
sueldos de hambre, que obligan legalmente
a desviar recursos de los pobres para remitirlos a los banqueros, que obligan legalmente a las Fuerzas de Seguridad a
reprimir a los despojados, que obligan legalmente
a quienes Juramos Lealtad a la Patria y a su Bandera, a cruzarnos de brazos
mientras castigan los cuerpos y espíritus de nuestros hermanos a quienes amamos.
El Segundo Mandamiento es “Amarás al
prójimo como a ti mismo” pero las Estructuras nos obligan legalmente a cruzarnos de brazos
mientras los Mercados, sus banqueros,
sus políticos, sus jueces, castigan a nuestros hermanos y sus periodistas
presionan y mienten para que sigamos cruzados de brazos.
“Las Estructuras de Pecado son expresión y efecto de los pecados
personales. Inducen a sus víctimas a cometer el mal. En un sentido analógico
constituyen un ‘pecado social’”. Catecismo de la Iglesia Católica – 1869.
Las Estructuras de Pecado son también un Mal si adherimos a ellas, si nos aprovechamos de ellas, si las apoyamos y reforzamos porque convienen a nuestros intereses, si
seguimos el mensaje de los medios de comunicación y vamos contra nuestros mandatos
como creyentes y argentinos. Adherimos por pasividad y omisión si nos
convertimos en perros guardianes de los poderosos y los corruptos. No nos
importa tener problemas con la Ley. Lo que no queremos es tener problemas con
Dios por desobedecer. Dios nos pide que amemos al prójimo y los banqueros nos ordenan
la destrucción del prójimo ¿Qué camino debemos tomar?
“Nadie puede servir a dos señores porque aborrecerá a uno y amará al
otro, o bien, se interesará por el primero y menospreciará al segundo. No se
puede servir a Dios y al Dinero” “Bienaventurados los perseguidos por practicar
la Justicia, porque a ellos les pertenece el Reino de Dios” “Hay que obedecer a
Dios antes que a los hombres” Mt 6:24,
5:10, Hech.5:29
¿Patria o Estructura de Pecado? Muchos no tienen conciencia de su responsabilidad social y patriótica
porque no ven la institucionalización del Pecado Social. Viendo una escuela
carente de lo elemental, un hospital, una villa miseria, se comienza a percibir
que la gran mayoría de los problemas sociales y nacionales no son algo natural sino un resultado de la dependencia. Son resultado del conjunto de normas,
leyes, sistemas, instituciones; que deben ser extirpados o cambiados si
queremos tener una Patria.
La situación
privilegiada de unos pocos, la situación miserable de muchos, son dos caras de
la misma moneda. No quedemos en la actitud hipócrita de quienes dicen “yo no tengo la culpa”. Hay pobres porque hay ricos, porque hay
injusticia, porque hay violencia jurídica y se convierte en violencia social.
No escondamos la cabeza como el avestruz, la violencia alcanzará a unos y a
otros, de una u otra forma. “Ustedes
creen alejar el día de desgracia y apresuran el reino de la violencia… y
terminará la orgía de los libertinos” Am. 6:3
Hemos Jurado Lealtad a
la Patria y su Bandera. No podemos quedar de brazos cruzados si las Estructuras
Liberales de Pecado azotan nuestra patria y nuestro pueblo. No podemos quedar
en la postura formal que nos ató las manos, como en Malvinas, cuando estábamos
en guerra y el ministro Alemann proponía privatizar todas las empresas del
Estado, el patrimonio nacional, y pagaba los intereses de la deuda a los mismos
bancos que financiaban la guerra en contra nuestro.
Hay terrorismo en lo
físico y subversión en lo filosófico. Ambos se expresan en términos de
izquierda y derecha. No es casualidad que el escocés Adams Smith y el alemán
Karl Marx hayan trabajado y escrito en Londres. Son dos brazos de la misma
tenaza, del mismo concepto materialista del hombre.
El Proceso fue un
fracaso, una derrota nacional, porque combatió sólo el brazo izquierdo de la
subversión y permitió al brazo derecho seguir creciendo, destrozando la Patria,
permitiendo que el liberalismo asolara cada vez más a nuestro pueblo. Las FFAA
y FFSS también pagan caro haberse convertido en perros guardianes de los
poderosos. Salieron a reventar cuevas mientras los Martínez de Hoz, los Alemann
y los Cavallo hacían su negocio. No
se puede defender a la Patria con la visión liberal del enemigo.
¿Dios o Dinero? ¿Religión de
Imperio o Religión de Oprimidos?
“El
dinero es el ídolo de nuestro tiempo… y, según la fortuna también miden la
honorabilidad… Todo esto se debe a la convicción de que con la riqueza se puede
todo. La riqueza es uno de los ídolos de nuestros días…” Catecismo de la
Iglesia Católica – 1723
El dinero es unidad de
valor y medio de cambio, ¿El dinero debe estar al servicio del Bien Común o la
Patria al servicio del Dinero? En torno a esta pregunta los argentinos se han
dividido y desangrado desde que se contrajo la primera Deuda Externa con Baring
Brothers en 1821.
Los fenicios mataban a sus hijos en el altar del dios del
dinero y para ser beneficiados con más dinero. En Argentina mueren más de 100
chicos al día, más de 36.500 al año, por hambre y otras causas evitables,
mientras se destinan recursos a los Dueños del Dinero. No hemos avanzado nada
desde los fenicios, ni podemos seguir con una Patria al servicio del Dinero.
Los liberales, y más
desde lo medios de comunicación; piden, ordenan, imponen, exigen, obligan, advierten
y usan todo el arsenal de guerra sicológica para que paguemos la Deuda Externa
no importa que sacrificio cueste. Los liberales han fracasado, lo demuestra la
situación social, y su única respuesta es pedir más de lo mismo, es pedir y
provocar más sufrimiento para seguir robando:
“Y
Dios les responderá: ‘Los aseguro que cada vez que lo hicieron con el más
pequeño de mis hermanos. Lo hicieron conmigo’” Mt 25:36
No podemos seguir con
la Patria al servicio del Dinero. Como mínimo debemos controlar, para empezar,
los bancos, el sistema financiero-previsional y el comercio exterior, la tierra
para el que la trabaja y no para el que especula, los recursos naturales al
servicio del pueblo, la liberación de la esclavitud del dinero... Los liberales
se horrorizarán y dirán que somos socialistas. ¿Y qué?
“La multitud de los creyentes tenía un solo corazón y una sola alma.
Nadie consideraba a sus bienes como propios sino que todo era común entre ellos… Ninguno padecía necesidad, porque
todos los que poseían tierras o casas las vendían y ponían el dinero a disposición de los Apóstoles, para que se
distribuyera a cada uno según sus necesidades” Hechos 4:32
Nuestro socialismo es mucho más antiguo, y más
peligroso para los liberales, que el marxismo, viene desde la primera comunidad
cristiana en Jerusalén, hace 2.000 años,
y fue fundado por los propios apóstoles. Ha sobrevivido a todo tipo de
persecuciones; de mercaderes de templo, imperios, emperadores, esclavistas y fariseos.
El cristianismo fue la base de una Civilización superadora de la Roma materialista
y es la Religión de la Solidaridad como expresión del “Ama al prójimo como a ti mismo”. Los liberales son el partido de
los ricos contra los pobres, de los egoístas sin solidaridad contra los pobres,
el pueblo de Dios.
“No
regalas al pobre una parte de lo tuyo, sino que devuelves algo de lo que es
suyo, porque lo que es común y dado para el uso de todos, te lo apropias tu
solo. La tierra es de todos, no de los ricos. Devuelve por lo tanto, una cosa
debida. No regalas algo no debido” San Ambrosio de Milán “Para todos h sido
creado el mundo, pero unos pocos se esfuerzan en defender que es solo de ellos”
San Juan Crisóstomo.
Dios confió la Tierra y sus recursos a la administración
común de la humanidad para que
cuidara de ellos, los dominaran mediante su trabajo y se beneficiara de sus
frutos. (Gn. 1:26-29) Los bienes de la creación están destinados a todo el género humano. La tierra se reparte entre los hombres para dar seguridad a su vida, expuesta a la penuria y amenazada por la violencia. La apropiación de bienes es
legítima para garantizar la libertad
y la dignidad de las personas, para ayudar
a cada uno a atender sus necesidades fundamentales y las de los que están a su
cargo. (Catecismo de la Iglesia Católica – 2402)
La apropiación de la tierra, y sus bienes, es ilegítima cuando no garantiza sino que agrava la situación de inseguridad de la vida, la penuria, la violencia, desampara la libertad y la dignidad, y abandona
las necesidades fundamentales al Bien Común.
Del
Robo al Bien Común y lo que encubre. “VII No Robarás”. Dios =
Dominus en latín, es Dueño de la Tierra. Lo que le cede al hombre es la
tenencia temporal de la tierra para que cumpla su mandato: “Sean fecundos, multiplíquense, llenen la tierra… ” Gen. 1:28.
Luego: “Ganarás el pan con el sudor de tu
frente” Gen. 4:19.
Es una blasfemia
liberal decir que la tierra y sus bienes son propiedad privada de unos
ricos y hasta el fin de los tiempos, al servicio del lucro y no del Bien Común.
El robo, de
la tierra y sus bienes, es la usurpación
del bien ajeno contra la voluntad razonable de su dueño. En el Séptimo
Mandamiento están no sólo los delitos del Código Penal; hurto, robo, extorsión, estafas, usura,
quiebras fraudulentas, vaciamientos, usurpación, piratería, delitos contra la
salud, cohecho, malversación, exacción, enriquecimiento ilícito, prevaricato,
falsificación, fraudes al comercio y subversión económica; y agravados cuando
además en lo social perjudican la vida, salud, integridad o libertad de sus
semejantes.
Son ofensas al Séptimo Mandamiento la especulación con bienes de necesidad
inmediata, el pago de salarios injustos,
elevar los precios monopolizando
bienes necesarios, la corrupción para
viciar el juicio de los que toman decisiones, la apropiación de bienes sociales, los servicios públicos mal hechos, los gastos públicos excesivos y/o innecesarios,
el despilfarro de bienes sociales, el
daño a la propiedad social, la promesa electoral no cumplida, la esclavitud encubierta o no, las
políticas que niegan el acceso al trabajo
y provocan la desocupación,
crear desempleo para lucrar con el “libre comercio” o las paridades cambiarias, el atentar contra
la justicia social. El Régimen que padecemos
se basa en la violación sistemática del Séptimo Mandamiento.
La
Subversión Liberal. El
Principio y Fin del Liberalismo es la desobediencia al Décimo Mandamiento: “No
codiciarás… nada que sea de tu prójimo”. Todos estos males tienen origen en
la violación del Décimo Mandamiento. La Codicia
es el motor del Liberalismo y sus males.
El fin legítimo de la política y la economía es el
social, mejorar el Bien Común. El lucro puede ser uno de sus medios, siempre y
cuando no afecte a la Solidaridad Social. El Bien Común de la Patria y el
Pueblo esta por encima de todo interés individual y egoísta.
Pero el liberal, subvierte estos conceptos elementales
y pone el beneficio individual por encima del Bien Común de la Patria y el
Pueblo. Para ello no vacila en la Violencia, institucional, social o la que
sea. Luego no vacila en la mentira y hacer aparecer a las víctimas como
victimarios.
Por supuesto que algunos países les resultó bien el
liberalismo, pero el liberalismo del primer mundo también incluye la piratería, la conquista, el saqueo al Tercer Mundo, el
esclavismo, la guerra, el tráfico y las guerras del opio, el comercio
monopólico, el imperialismo, la intervención militar para el cobro de deudas
usurarias, la violación de todo derecho humano, los crímenes contra la
humanidad, la violencia institucional contra los pobres, etc.
Los liberales
del Primer Mundo ocultan el hecho
fundamental que, para que cada habitante del Primer Mundo pueda ser rico, hay muchos habitantes del Tercer
Mundo que deben ser pobres y
saqueados de sus recursos. En el Primer Mundo no hay país rico que en su momento no haya usado a los pobres como carne de
cañón en sus guerras de saqueos o en la explotación obrera más despiadada. El
primer insumo de su riqueza fueron sus propios pobres y el segundo los
colonizados a quienes rebajaron a pobres mediante las guerras coloniales.
Los liberales argentinos lo saben y lo callan. Aspiran
a seguir en su papel de oligarquía intermediaria entre los ricos extranjeros y
los argentinos pobres, en ser los socios menores en el saqueo y destrucción de
la Patria. No sólo son subversivos, son Traidores a la Patria.
El deber del cristiano es servir a su prójimo pero los
liberales quieren que la Patria y el Pueblo estén a su servicio: “ustedes saben que los jefes de las naciones
dominan sobre ellas y los poderosos hacen sentir su autoridad. Entre ustedes no
será así. Al contrario, el que quiere ser grande que se haga servidor de
ustedes”.
Sabemos que piensan de nosotros los liberales. No
importa que calificativo nos pongan. Les
toca a los liberales demostrar que son cristianos y patriotas.
Obligación de Resistencia a
la Opresión. El ciudadano tiene obligación en conciencia de no seguir las prescripciones las
autoridades civiles cuando estas son
contrarias la las exigencias del orden moral, a los derechos fundamentales
de las personas o a las enseñanzas del Evangelio. (Catecismo de la Iglesia
Católica – 2242).
Cuando hay antagonismo entre el servicio de Dios y el
servicio político, se da prioridad a: “Dad
al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”Mt 22:21.
Cuando la autoridad pública, excediéndose en sus
competencias, oprime a los ciudadanos, estos deben obedecer sólo las exigencias
objetivas del Bien Común, les es lícito defender sus derechos y los de sus
conciudadanos contra el abuso de esta autoridad guardando los límites que
señala la ley natural y evangélica (Catecismo de la Iglesia Católica – 2242).
En la resistencia
a la opresión se podrá recurrir legítimamente a las armas cuando se reúnan
las siguientes condiciones: 1) en caso de violaciones ciertas, graves y
prolongadas de los derechos fundamentales, 2) después de haber agotado todos
los otros recursos, 3) sin provocar desórdenes peores, 4) que haya esperanza
fundada de éxito, 5) si es imposible prever razonablemente soluciones mejores.
(Catecismo de la Iglesia Católica – 2243).
La legítima defensa puede no solamente ser un derecho
sino un deber grave, para el que es
responsable de la vida de otro, del Bien Común de la familia o de la sociedad.
La preservación del Bien Común de la sociedad exige colocar al agresor en
estado de no poder causar perjuicio.
Catecismo de la Iglesia Católica – 2265).
Resumen:
-
El
liberalismo es dañino para Argentina y así lo demuestra la realidad, la única
verdad.
-
También
demostró ser una fuerza subversiva causante de un terrorismo social.
-
No piensa
ni reconocer ni reparar su daño al Bien Común, sino por el contrario, su
intención es agravarlo.
-
Una
oligarquía liberal no es un hecho unipersonal
sino social. Se trata de una serie de elites oligárquicas en lo
político, económico, jurídico, periodístico y sindical; que se encubren y
defienden mutuamente. No se trata de convencer a una persona sino que se trata
de obligar a una clase a dejar el Poder.
-
Para
combatir con legitimidad a esta clase usurpadora, es necesario que del seno del
pueblo surja una conducción con legitimidad de origen y de fines. La
contradicción principal es entre una minoría anti-patriótica y una gran masa
popular. Deben dejarse de lado las contradicciones secundarias que hay en el
seno del pueblo para concentrar las fuerzas contra el enemigo principal.
-
La obra
nacional no puede ser una obra de minorías ya que sería reemplazar una
oligarquía por otra. Debe ser obra de un movimiento popular. Este no se
construye en poco tiempo y la impaciencia puede ser contrarrevolucionaria.
-
Esta
oligarquía intentará prolongar su dominio fomentando la división y el
enfrentamiento popular. Los miembros de las fuerzas de seguridad y policiales a
los que se le dé la orden de represión al pueblo, deben ser concientes de que
es una orden injusta y antinacional. Además la oligarquía trata de enfrentar
“pueblo en uniforme” con pueblo civil.
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En ese
plan de enfrentamiento, el Imperio tratará de que sus agentes se infiltren en
las movilizaciones populares para provocar una violencia contrarrevolucionaria.
No debemos caer en los errores de los ’70. La prudencia y el diálogo
constructivo entre todos los sectores es la mejor garantía de triunfo.
Por Vcom. (R) Horacio
Ricciardelli
Cóndor
Secretaría de Doctrina
Bs. As. 25. Jun.02
“en defensa de la patria… todo
es lícito menos dejarla perecer” José de San Martín
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